Conoce los distintos tipos de retención del IRPF para autónomos en España

En este artículo vamos a hablar sobre los diferentes tipos de retención del IRPF que existen para Autónomos en España. Es importante conocer estos porcentajes, ya que afectan directamente a nuestra tributación y al dinero que recibimos de nuestros clientes. ¡No te pierdas esta guía completa para entender las retenciones del IRPF!

Conoce los diferentes tipos de retención del IRPF para Autónomos en España

Retenciones del IRPF para Autónomos en España

Como autónomo en España, estás obligado a hacer una retención del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF) en cada factura emitida a tus clientes. Esta retención es una forma de adelanto de impuestos que el autónomo debe realizar en nombre del cliente, por lo que éste paga sólo el importe restante (sin la retención) al autónomo.

Tipo general de retención del IRPF en Autónomos

El tipo general de retención del IRPF para autónomos en España es del 15% sobre la base imponible de la factura, aunque hay algunas excepciones y particularidades que pueden influir en este porcentaje.

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Bienes de escasa o nula amortización

En caso de que los servicios prestados o los bienes vendidos por el autónomo sean de escasa o nula amortización, la retención del IRPF se reduce al 7%.

Actividades profesionales

En el caso de los autónomos que realizan actividades profesionales reguladas, como abogados, arquitectos o economistas, la retención del IRPF es del 21%.

Nuevos autónomos

Los nuevos autónomos, durante los primeros tres años de actividad, tienen un tipo de retención reducido del 7% en concepto de IRPF.

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Es importante tener en cuenta que estas retenciones son un adelanto de impuestos, y que al final del ejercicio fiscal deberás declarar la totalidad de tus ingresos, gastos y retenciones realizadas a lo largo del año para calcular el impuesto final a pagar.

¿Cuáles son los tipos de IRPF?

El Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF) es un tributo que grava las rentas percibidas por los autónomos a lo largo del año fiscal. En el contexto de los autónomos, existen dos tipos de IRPF:

1. IRPF trimestral: Los autónomos deben realizar pagos trimestrales a cuenta del IRPF, en función de sus ingresos y gastos del trimestre anterior. Estos pagos son provisionales y se ajustan mediante la declaración anual de IRPF.

2. IRPF anual: Al final de cada año fiscal, los autónomos deben presentar la declaración de IRPF correspondiente al ejercicio anual. En esta declaración, se incluyen todos los ingresos y gastos del año anterior y se liquida el impuesto a pagar o la devolución correspondiente.

En resumen, los autónomos deben realizar pagos trimestrales a cuenta del impuesto y una liquidación anual en la que se ajustan los pagos realizados a lo largo del año. Es importante para los autónomos llevar un control riguroso de sus ingresos y gastos para poder cumplir con las obligaciones tributarias correspondientes.

¿En qué momento se realiza la retención del 2 %?

La retención del 2 % se realiza en el momento en el que un autónomo emite una factura a una empresa o entidad pública, y esta última está obligada a realizar la retención correspondiente sobre el importe de la factura. Es decir, cuando un autónomo cobra una factura emitida a una empresa o entidad pública, la cantidad que recibe ya incluye la retención del 2 %. Esta retención debe ser ingresada por la empresa o entidad pública a Hacienda en nombre del autónomo. Es importante destacar que esta retención es una forma de adelantar el pago del IRPF, impuesto que el autónomo deberá liquidar al final de cada ejercicio fiscal. Por lo tanto, es fundamental para los autónomos tener en cuenta este proceso para que puedan llevar correctamente su contabilidad, cumplir con sus obligaciones fiscales y evitar posibles sanciones.

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¿En qué casos se aplica una retención del 19 %?

En el contexto de los Autónomos, la retención del 19 % se aplica especialmente en las facturas emitidas por servicios prestados a empresas o personas jurídicas. Según la normativa fiscal, los profesionales autónomos que desarrollan actividades empresariales o profesionales están obligados a practicar una retención del IRPF a sus clientes en el momento de emitir una factura por sus servicios. Esta retención se realiza como anticipo del impuesto sobre la renta que deberá declararse en la declaración anual del IRPF. El tipo general de retención establecido para estos casos es del 19 %, aunque en algunos casos particulares puede variar.

Preguntas Frecuentes

¿Cuáles son los tipos de retención del IRPF que deben aplicar los autónomos según su actividad económica?

Los tipos de retención del IRPF que deben aplicar los autónomos según su actividad económica son:

– Actividades profesionales: los autónomos que desarrollan actividades profesionales, como abogados o arquitectos, deben aplicar una retención del 15% en sus facturas. No obstante, si el autónomo ha iniciado su actividad en el año en curso o en el anterior y su volumen de rendimientos íntegros no supera los 15.000 euros anuales, podrá aplicar una retención del 7%.

– Actividades empresariales: en el caso de los autónomos que desarrollan actividades empresariales, como comerciantes o fabricantes, la retención del IRPF dependerá del tipo de servicio que se preste. Así, por ejemplo, para la venta de bienes muebles la retención será del 1%, mientras que para servicios de publicidad o consultoría será del 7%.

– Actividades agrícolas y ganaderas: para estos autónomos la retención será del 2% en general, pero si su facturación no supera los 2.000 euros anuales no tendrán que aplicar retención alguna.

Es importante que los autónomos conozcan bien cuál es el tipo de retención que deben aplicar según su actividad económica para evitar posibles sanciones tributarias.

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¿Cómo calculo el porcentaje de retención del IRPF que debo aplicar como autónomo?

Para calcular el porcentaje de retención del IRPF que debes aplicar como autónomo, primero debes saber en qué tramo de ingresos te encuentras. En función de tus ingresos anuales, tendrás que aplicar un porcentaje de retención u otro.

Para el año 2021, los tramos de retención son los siguientes:
– Hasta 12.450 euros: retención del 19%
– De 12.450 a 20.200 euros: retención del 24%
– De 20.200 a 35.200 euros: retención del 30%
– De 35.200 a 60.000 euros: retención del 37%
– Más de 60.000 euros: retención del 45%

Por ejemplo, si tus ingresos anuales son de 25.000 euros, deberás aplicar una retención del 30% sobre tus facturas. Es decir, si emites una factura por valor de 1.000 euros, tendrás que retener 300 euros para el IRPF y declararlos en tu modelo 130 trimestralmente o en el modelo 100 anual.

Recuerda que la retención del IRPF es una cantidad que se anticipa a Hacienda por parte del pagador (en este caso, el cliente), pero que en realidad es una parte del impuesto que deberás pagar al final del año fiscal. Por lo tanto, no es un gasto para ti sino un adelanto de tus obligaciones fiscales.

¿Puedo solicitar una reducción en el tipo de retención del IRPF como autónomo si mis ingresos no superan determinada cantidad?

Sí, puedes solicitar una reducción en el tipo de retención del IRPF si eres autónomo y cumples con ciertas condiciones.

En concreto, si tus ingresos de actividades económicas no superan los 15.000 euros anuales, puedes solicitar una reducción en la base de retención del IRPF del 21% al 15%. Esta reducción se aplicaría a los pagos que recibas por tus servicios como autónomo.

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Para solicitar esta reducción, debes presentar un modelo 036 o 037 en Hacienda informando de tu situación y solicitando la aplicación del tipo de retención reducido del 15%.

Es importante tener en cuenta que esta reducción solo se aplicará si cumples con los requisitos establecidos y si presentas correctamente la solicitud en Hacienda. Además, es recomendable consultar con un asesor fiscal para asegurarte de que estás cumpliendo correctamente con tus obligaciones fiscales.

En conclusión, los tipos de retención del IRPF son un aspecto importante a tener en cuenta para los autónomos a la hora de realizar sus facturas y pagos de impuestos. Es importante conocer los porcentajes que se aplican según las actividades económicas y los ingresos obtenidos para evitar sorpresas desagradables en la declaración de la renta. Además, es fundamental mantenerse actualizado sobre posibles cambios en la normativa fiscal que puedan afectar estos tipos de retención. En resumen, prestar atención a la retención del IRPF es una obligación para los autónomos que quieren llevar su negocio de manera legal y responsable.

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🚀Emprendedor compulsivo ⚡ Ceo & Founder de Ayudas Autónomos y Ludigital Solutions 🔥28 Proyectos a sus espaldas y los que quedan.. ✅Ayudando a las empresas a crecer desde el 2014

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